Evaluación personalizada por un especialista en salud visual.
Revisión detallada de tus ojos para detectar problemas como conjuntivitis, glaucoma, o cataratas.
Orientación profesional sobre el cuidado y la salud ocular.
Uso de tecnología avanzada para medir defectos refractivos como miopía, hipermetropía o astigmatismo.
Control preciso de la presión intraocular para prevenir enfermedades como el glaucoma.
Diagnóstico rápido y confiable con equipos de última generación.